Una leyenda viviente - Texto: Leandro (Publicado en Arterias #12 – Agosto/Septiembre 2007)

Es de madrugada, apenas las 3, no hay ninguna luz en las casas del barrio, la ventana de mi cuarto de trabajo es la única iluminada y estoy pensando que excusa darle al editor para no volver a entregarle una nota. Con la radio clavada en la “Rock and Pop”, la calefacción prendida, apenas escucho los ruidos de la calle.
De repente se corta la luz y se siente un silencio total. Los mil y un ruidos que siempre se oyen en una ciudad, aun en plena noche, habían cesado por completo. La radio estaba muda. Quizás por no levantarme o porque esto lo había leído en otro lado, no quería asomarme por la ventana, sin embargo mi curiosidad pudo mas, me asome y no podía creer lo que estaba viendo! Nieva en Buenos Aires! Igual que en El Eternauta! Y yo que nunca termine el teje de escafandra para el cosplay!!
Esta obra maestra del comic, que originalmente iba a ser un cuento corto de 70 cuadros, publicada entre 1957 y1959 en la "Hora Cero Semanal" fue escrita por el mejor guionista de estos pagos Héctor German Oestreheld y dibujada por el maestro Francisco Solano López, habían trabajado en “Bull Rockett”, “Uma-Uma” y “Rolo el Marciano adoptivo”, nos presentaban una historia en la que la familia común rodeada de muerte debe enfrentar una invasión alienígena, un enemigo desconocido e inalcanzable. Este enemigo que se presenta con la nevada mortal, luego con los cascarudos, los gurbos y los manos, que en un principio parecieran ser los verdaderos artífices de toda esta destrucción, pero se descubrirá que no es así ya que son los Ellos los verdaderos ideólogos de toda esta matanza; los Ellos, especie de señores feudales del espacio, se presentan mas bien en forma de concepto que de personajes ya que nunca se los logra ver.
No es difícil encontrar similitudes de los personajes del comic con figuras de nuestra historia, ya que la realidad del país no pasaba inadvertida para el guionista y militante de los montoneros.
En “El Eternauta” Juan Salvo junto a su esposa Elena, su hija Martita, Favalli, Lucas Herbert y otros que se irán sumando forman el concepto de heroe colectivo; además de que la acción se plantea en Buenos Aires, ilustrada por los excelentes trazos de Solano que contó con la colaboración de Julio Schiaffino y del entonces aprendiz José Muñoz, mezclando en un equilibrio perfecto la ciencia-ficción, la localia y el costumbrismo.

La reinterpretación
En mayo del 69 la revista Gente, si aunque no lo crean, le encarga a Oestreheld y al maestro Alberto Breccia, una nueva versión del exitoso comic. Sin embargo fue levantada con la excusa de que el arte de Breccia, quien experimento con collage y tramas mecánicas para encontrar una mejor expresión, era muy vanguardista para el publico, pero en realidad les incomodaba el hecho de que Herman estaba cada vez mas involucrado con la izquierda. Pese a que fue terminada a las apuradas con enormes textos en las ultimas paginas, fue esta obra la que le dio la posibilidad al Eternauta de entrar en Europa ya que fue un exitazo y logro que se publicara la anterior, dibujada por Solano, la cual a nivel grafico y según el mismo Breccia es superior.

El regreso
En el 76 bajo la dictadura de Videla, “Ediciones Record” reedita “El Eternauta”, cosa que con los años se le haría costumbre y el "Libro de Oro de Skorpio" nos presenta "El Eternauta segunda parte", con Oestreheld como jefe de prensa de los montoneros y con sus hijas combatiendo al ejercito en Tucumán decide transformar la obra en una pancarta, pasando de una sutil protesta a una mas marcada y partidista; cosas que a Solano López no siempre le agradaba, haciendo que el dúo tuviese sus primeras falencias y los guiones fueran muchas veces reescritos.
Aquí Juan Salvo viaja al año 2100 y se encuentra con un Buenos Aires desvastada por el ataque atómico del final de la primera, los sobrevivientes viven en cuevas sometidos por los Ellos. Juan organiza a los sobrevivientes en un ejercito popular, ha perdido toda su grandiosa humanidad y tiene una mira con ojos de abismo que demuestran su odio al invasor y la consigna ahora es ganar a cualquier precio. Incluso las propias vidas de sus hijas y la desaparición de H. G. Oestreheld.

Oportunistas
En el 83 con la vuelta de la democracia, Alfredo Scutti, director de "Ediciones Record" ve que le va muy bien con las infinitas reediciones de las dos primeras partes y decide encargar una tercera, pero con el guionista desaparecido y el rechazo por parte de Solano decide llamar a Alberto Ongaro para el guión, que carece de todo los mensajes y de cualquier segunda lectura, a Oswal para los lápices, a Mario Morían en tintas y a Carlos Meglia en los fondos. Pese al no de Solano realizo algunos rostros, aunque pidió que no apareciera su nombre en los créditos.
En 1997 Solano decide traer de vuelta (con un ridículo signo de infinito en el pecho) al mítico personaje y acompañado por Pol en los guiones crean a todo color "El Mundo Arrepentido" publicado en capítulos por la "Revista Nueva", que se distribuye con los diarios de los domingos del interior del país, y recopilado por el "Club del Comic Ediciones" en el 98.
Esta historietita nos presenta al heroe de grupo totalmente olvidado y reemplazado por una especie de súper Eternauta. Malísima.
En el 99 a Pablo Muñoz dueño de “Comic Press” (que por ahorrarse unos mangos hace el guión) en conjunto con "Ediciones Record" publican “El Eternauta, odio cósmico” en formato de comic book dibujado por Walter Taborda y un equipo (muy deficiente) de dibujantes y coloristas; solo se publicaron tres tristes números.

Un verdadero regreso
“El Eternauta, el regreso” editada y dibujada por Solano
Lopez y escrita por Pablo Maiztegui es un merecido regreso del legendario Juan Salvo. Protagonizada por su, ya crecidita, hija Martita, quien fue adoptada y criada por un Mano, al que llama padrino. En esta Buenos Aires reconstruida por la tecnología de los Manos, quienes conviven en paz y armonía con los humanos. Juan Salvo llegara buscando a su mujer y a su hija, quitando la venda de los ojos impuesta por los invasores.

El Eternauta esta entre nosotros, para recordarnos que si la historia la escriben los que ganan, eso quiere decir que hay otra historia, la verdadera.